Días atrás, una sorpresiva noticia convulsionaba el handball chileno y continental: Tres reconocidos jugadores (Patricio Martínez, Erwin y Emil Feuchtmann) presentaban su
renuncia a la selección de ese país enviando una carta a los medios donde aducían falta de "orden, disciplina y profesionalismo" del entrenador nacional.
Tras consultas de algunos periódicos, los jugadores renunciantes ampliaron diciendo que ellos querían llegar a los Juegos Olímpicos de Río 2016 y que pensaban que con este entrenador actual no iban a lograrlo. También, indicaron que si se removía del cargo a Fernando Capurro y se traía a un entrenador "de nivel europeo", volverían a la selección.
Algunas cuestiones que merecen ser comentadas sobre el tema:
- La enorme presión que los propios jugadores se están creando respecto a los venideros Juegos Sudamericanos (ODESUR) a disputarse en Chile durante el mes de marzo 2014.
Presionar en este momento para obtener lo que estiman justo es totalmente lógico. Los jugadores saben que los Comités Olímpicos “aman las medallas”, y que el handball masculino es medalla casi segura para Chile en ODESUR.
Hasta aquí, los jugadores han presionado públicamente con:
a) no jugar en ODESUR si no se obtenían las becas que les habían prometido (LINK),
b) no jugar en ODESUR (como último recurso) si no aparecía el dinero de los pasajes para los juveniles / juniors (LINK) y
c) renunciar a la selección y no jugar ODESUR si no cambian al entrenador (3 jugadores) (LINK)
Mucha presión para ellos mismos, que podría jugarles en contra al momento de la competición.
No obstante, la medalla de bronce parece clara para Chile ya que se ha demostrado en los últimos tiempos tener una clara ventaja sobre Uruguay.
¿Puede aspirar Chile a algo más que el bronce? Sí, porque ha estado MUY cerca de ARG/BRA y estos equipos seguramente viajarán algo disminuidos a ODESUR porque la fecha de realización coincide con temporada europea y varios jugadores no podrán estar presentes o no serán convocados para que puedan asentarse en sus nuevos clubes.
- Como decíamos, Chile ha estado muy cerca de Argentina (derrota por uno en Guadalajara 2011 y empate en el Panamericano 2012 – En ambos casos terminando Chile en ataque) y de Brasil (derrota ajustada en el Panamericano 2012). Como mencionábamos en aquel momento, la lucha en Panamérica ya no parece ser cosa de dos (LINK).
En todos estos casos, el equipo chileno ha estado bajo las órdenes del entrenador Capurro quien parece tener mucho que ver con el crecimiento del handball de ese país. Capurro asumió en 2010, llegando a partir de ese momento a clasificar a dos mundiales (2011 y 2013) y a poner a Chile como candidato indiscutido al podio panamericano. Inclusive, con un equipo integrado totalmente por jugadores que actuaban localmente en Chile, logró clasificar a los JJPP de Guadalajara derrotando a Uruguay en los ODESUR 2010.
En su momento, comentábamos vía twitter que esto podría irremediablemente desembocar en un problema de liderazgo. Porque, lo hayan querido los jugadores o no, esto irá más allá del nombre de un entrenador y terminará poniendo sobre la mesa el hecho de saber quién es el que toma las decisiones en el handball chileno.
De acuerdo a lo citado por el periódico El Mercurio (
Link), hubo 5 meses de negociaciones de los jugadores con los dirigentes antes de hacer pública su renuncia a la selección. Así, los jugadores parecen renunciar no sólo porque no aceptan al entrenador, sino también porque no aceptan la decisión de los dirigentes a su pedido de cambio.
La Federación Chilena se ha tomado unos días y realizará mañana, sábado, una reunión para tratar el tema. El lunes daría un comunicado.
Todo apunta a que la Federación ratificará al entrenador.
Otra cosa sería una absoluta sorpresa (sin mencionar que le costaría mucho dinero a la Federación Chilena en cuanto a despido del entrenador).
Los jugadores seguramente intuyen que esa será la decisión de la Federación. Patricio Martínez ha comentado a Bio Bio que saben que "
esta decisión no vendrá sin grandes trastornos y conflictos" (link).
Restará saber hasta donde lucharán los jugadores para remover a Capurro y cuantos otros jugadores comparten su posición. Hasta aquí sólo ellos tres se han pronunciado públicamente.
La renuncia, con amplia cobertura mediática, se da pocos días antes de que la selección nacional junior de Chile viaje al Campeonato Mundial de la categoría. Las posibilidades de avanzar en ese mundial parecen a priori muy pocas (comparte grupo con España, Egipto, Suecia, Kuwait y Brasil). Capurro estará seguramente en el banco y no sería extraño que el equipo sufriera algunas claras derrotas (lo que ocurriría con Capurro, o con cualquier otro entrenador). Para los medios no especializados: ¿Una goleada por 15 goles con Capurro en el banco les da la razón a los jugadores? ¿Lo usarán los jugadores para reclamar la razón?
Por otra parte, sin tres jugadores de experiencia en Europa, las posibilidades de Chile se reducen también en los Juegos ODESUR. Las críticas podrían volver en ese momento si Chile no obtiene el oro en la competencia (algo que sería totalmente lógico con un plantel disminuido).
Ese parecería ser el límite: Si luego de ODESUR los jugadores no logran quitar a Capurro de su cargo alguien deberá tratar de convencerlos de cambiar su decisión. Quedaría por saber si, en caso de hacerlo, Capurro los aceptaría en su equipo luego de los ataques recibidos.
Como sea, si no hay una solución que una a todas las partes el handball chileno saldrá perdiendo. Faltan dos años para Toronto 2015 y su clasificación a esa competencia no parece peligrar. Dos años parece tiempo más que suficiente para solucionar las cosas y permitir que Chile llegue con su mejor equipo. Habrá que ver que tanto se empeoran las relaciones en ese lapso.